¿Porqué proponemos desde el Compromiso Histórico, una limitación a las posibles mayorías aplastantes en nuestro sistema electoral?
Sencillamente, necesitamos un rodaje en el pluralismo, en la crítica, en el debate, en la negociación, necesitamos educarnos y educar en esas posibilidades. Han sido muchos los años del ordeno y mando absoluto sin ningún contrapoder y por ello, al pueblo hay que educarlo en esa nueva posibilidad que es lo plural.
Hay que educarlo en el debate, en la negociación para llegar a algún
consenso, en la búsqueda de argumentos entre todos para llegar a un final negociado, debatido suficientemente.
Se trata de satisfacer necesidades colectivas con bienes y servicios diversos, de usar medios y recursos escasos para satisfacer esas necesidades públicas y en eso, es conveniente que existe pluralidad de opiniones.
Dice Fidel que eso es caro para Cuba.
Bien, podría ser un argumento en contra pero, más caro es el coste político de la imposición de una única voluntad de una formación dominante, dominada a su vez por un momio y por un cerrado
comité que es el que decide sobre todos los temas. La falta de alternativas y de críticas, la falta consiguiente de libertad, también tiene un coste, es un coste político que es difícil de asumir. Limita a la persona, la hace seguir una única vía impuesta que, puede no ser la suya y, por lo tanto, no identificarse con el proyecto más que por el perjuicio que puede suponer (gusanera) llevar la contraria.
También se puede aducir la falta de gobernabilidad en un sistema con
mayorías no absolutas. En nuestro caso, se permiten, pero no las mayorías aplastantes limitadoras de cualquier control, fiscalización, anuladoras del debate, de la crítica, ...eliminadoras de hecho del pluralismo. Tenemos un sistema presidencialista y habría
que ver cómo se reparte el poder si se sigue con el sistema
presidencialista: Qué poderes de iniciativa va a conservar el Presidente y
cuales van a tener el gobierno, y no solo el gobierno general, los
municipios, ...Bien, pero de todos modos, no ha sido el problema fundamental de África desafortunadamente. Y en nuestro caso, la gente lo que conoce son mayorías aplastantes que no dejan lugar al pluralismo, a la crítica, al control, ...a la mera supervivencia del los partidos. Si se ha de optar, preferiría una sociedad plural, una sociedad que garantizara el pluralismo parlamentario efectivo (y si se puede el municipal) con todo lo que ello conlleva de diversidad de opciones y de vías. En otro caso, se constriñe artificialmente las vías o los equipos que el pueblo puede elegir a la hora de gobernar, a la hora de decidir sobre los recursos y las necesidades, a la hora de decidir una determinada vía con la que se identifiquen todos por recoger parte de las aportaciones de todos, el debate de todos, la opinión de todos, los argumentos de todos. Eso es muy importante en nuestro caso y hay que EDUCAR EN ESA POSIBILIDAD.
Que la gente pierda el miedo acumulado durante tantos y tantos años de criminales dictaduras: Franco, Macias, Obiang, ...
Que se pierda el miedo y que se aprenda a opinar, a escuchar la opinión del contrario en igualdad de condiciones, que se aprenda a debatir, a
argumentar, a no avasallar, a dejar el paso a otros que han convencido
mejor, o que han empleado mejores argumentos, ...a construir la patria y su historia entre todos.
Se pueden emplear formulas variadas para llegar a concretar la base, pero eso tendría que ser por consenso, que todos aceptáramos previamente que las mayorías aplastantes no son buenas en nuestro caso. Mayorías aplastantes que si se producen, los partidos o son ilegalizados de hecho o tienen que recurrir al exterior para financiarse y, ya se sabe, en el exterior no hay hermanitas de la caridad, hay buitres esperando la mínima para seguir robándonos alegremente.
De ese pluralismo impuesto, garantizado, se derivarían más pluralismos, en las comisiones de control de la corrupción, del control sobre la
transparencia, del control sobre el seguimiento de los DDHH, ...establecer una justicia para todos y, en el caso de los medios de comunicación, establecer tiempos, programas, que permitieran a la oposición (ya no minúscula) no solo acceder a la radio y a la TV, también tener sus propios medios de difusión (revistas, periódicos, ...)
Todo va unido en la propuesta de las bases del Compromiso Histórico. Es una propuesta para la libertad.
En otro caso, puede que tengamos suerte o puede que no y, el primer partido que se haga con una mayoría absoluta suficiente, por nuestras condiciones de precariedad económica y de miseria en que se encuentra sometido el pueblo, - situaciones tan condicionantes - hacerse en las siguientes elecciones con otra mayoría aplastante en todo su
significado, con todas las consecuencias negativas que vivimos ahora y en el pasado.
Es un riesgo que creo que no debemos correr. Salir de Obiang para caer en Obiang2. Hay que garantizar el pluralismo, hay que educar en el pluralismo. Hay que garantizar el control, hay que educar en la crítica y en la autocrítica. Hay que educar en la negociación, y hay que garantizar el debate, la argumentación, la representación de los intereses variados que se puedan confrontar, las líneas alternativas que se puedan seguir entre todos.
Esa es la idea.
Unas ideas surgidas del Foro Democrático de Guinea Ecuatorial, el único libre de Guinea Ecuatorial. ¿Qué no podría surgir de una situación de democracia plural y efectiva en GE?
En realidad ha sido ese bendito Foro Democrático el que ha hecho - con el debate, con la discusión, con la confrontación entre iguales - que surjan estas ideas sobre la necesidad del pluralismo en igualdad de condiciones, sobre el debate, sobre la negociación, sobre la necesidad de limitar mandatos y mayorías, sobre nuestra necesidad de rodaje democrático en una democracia con salvaguardias democráticas que impidan la aparición de otro momio salvador de la patria.
¡Patria SI! ¡Colonia NO!
Liga Espartaco.
Fuente: Propia.
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